Rosas

Abrió los ojos.Una cama extraña.Su mente recordaba espasmos de placer, su cuerpo se estremecia al recordarlo.Noche apasionada, noche loca, noche inolvidable.Santiago le habia hecho el amor de una forma increible, haciendola sentir como un ser perfecto a la par que frágil, que necesita todo y que no pide nada.Amor apasionado.Dar y recibir.Gabriela miro alrededor, triste, el no estaba ya.Se habia ido a trabajar.Pero su aroma aún perduraba en su nariz, su sabor aun la consumia, deseando probarlo otra vez.Era curioso, a la par que emocionante como se habia colado en su mente a lo largo de 2 semanas.En su mente, en su cuerpo y en su alma.Él le decia que no la entendia, a veces niña, a veces mujer, nunca un punto intermedio.Ella se limitaba a encojerse de hombros riendo.Ella siempre habia sido asi.Estremecida miro alrrededor.Entonces vió su libro preferido  abierto de par en par con una rosa entre una pagina que habia estado comentando con él un amanecer mientras observaban desnudos como el sol salia timidamente a darles los buenos dias.Esa página , en la parte superior, ponia algo que ya tenia memorizado en la cabeza y que la hizo sonreir al darse cuenta de que sin querer ya queria a ese maravilloso hombre.

' Te amo irrevocablemente, hasta la locura.Tu llenas mi dias de luz, los dias oscuros se vuelven luminosos a tu lado.Eres el ser mas especial que ha poblado la tierra y por ello te amo, aunque tu no me quieras.Es la realidad de este pobre hombre que quiere ser algo en tu vida'

Gabriela cerro el libro súbitamente emocionada mientras aspiraba el aroma de la rosa.Decididamente, ese hombre sabia como derretirla por dentro.